Ya en la década de 1960, Tineke entró en contacto con Casa Migrante y, desde que se graduó en la Universidad de Ámsterdam, como intérprete/traductora jurada. Tineke ayudó a la comunidad hispana en Ámsterdam durante décadas traduciendo todo tipo de documentos, desde actas de matrimonio, actas de nacimiento hasta todo tipo de documentos oficiales de inmigración. Del español al holandés y viceversa. Lo especial de Tineke fue que donó la totalidad de las ganancias de muchos miles de euros por año a Casa Migrante. “Pero ella también proporcionó otra fuente de financiamiento. Solicitó el subsidio municipal de Ámsterdam todos los años, lo que hizo en su papel de secretaria de la junta directiva. Así Tineke aportó más que su granito de arena a Casa Migrante. Incluso después de que entregó su papel de secretaria en 2014, Tineke llevaba una vida activa. En los últimos años se habí involucrado en la organización del archivo, por lo tanto de las historias, de nuestros migrantes de España y América Latina.
Tineke, alegre, llena de vida, enérgica pero sobre todo muy implicada en nuestra organización, nos dejó demasiado pronto.